Hace 50 años los primeros minutos de esta película impidieron a miles de personas poder nadar en paz
Sergio Negrete
-Redactor
Mi infancia estuvo repleta de películas de Disney en VHS. Bien podría ser un personaje de 'El diario de Bridget Jones', 'Fleabag' o 'Parks and Recreation'

Hasta el día de hoy, esta cinta es la culpable de que millones de personas alrededor del mundo piensen dos veces antes de adentrarse al mar.

El cine tiene el poder de despertar en el público miedos que ni siquiera ellos mismos conocían. Ser perseguido por un asesino en serie como Halloween o Scream, atestiguar los efectos de la maldad pura como en El exorcista y La profecía, o simplemente quedar varado en una carretera para ser atacados por criaturas monstruosas como en El demonio y Camino hacia el terror, estos algunos de los temores que se generan en los espectadores tras ver en la gran pantalla lo que podría ocurrir.

Más allá de los fenómenos sobrenaturales y psicópatas criminales, uno de los temas que más horror ha causado entre la audiencia es la brutalidad del mundo salvaje. Desde aves atacando a un pueblo como en Los pájaros de Alfred Hitchcock, hasta reptiles gigantescos devorando todo a su paso como en Anaconda con Jennifer Lopez y Jon Voight, el cine está repleto de escenarios catastróficos en donde cualquier ser humano podría convertirse en parte de la cadena alimentaria y sufrir una muerte inminente.

Sin lugar a dudas, de todas las historias sobre ataques animales que existen en el séptimo arte, la mejor ha sido una obra de Steven Spielberg que se estrenó hace 50 años. Hasta el día de hoy, esta cinta es la culpable de que millones de personas alrededor del mundo piensen dos veces antes de adentrarse al mar. La idea de que en el océano vive una criatura voraz con la capacidad de aniquilar a cualquier humano a su paso es gracias al gran trabajo que hizo el director de E.T., el extraterrestre en la década de los setenta con Tiburón.

Tiburón es el ejemplo de cómo el comienzo de una buena película puede quedar grabado para siempre en la memoria del espectador. En apenas tres minutos y medio, Spielberg logró traumatizar a la mayoría del público, dejando su huella en un clásico que hasta el día de hoy sirve de inspiración en el género del thriller. La atmósfera creada por Tiburón es uno de los entornos más extraordinarios, impidiendo que con el paso de los años, muchos de los cinéfilos puedan darse un baño en el mar sin sentir que hay depredador esperando su cena.

En la cinta, lo que comienza siendo una fiesta tranquila en la playa, con niños y adultos divirtiéndose en un día perfecto para estar afuera, rápidamente se convierte en una historia de terror cuando Chrissie decide meterse al agua. Pronto, la atmósfera cambia por completo cuando la joven ya se encuentra nadando en el mar, produciéndose la primera de muchas muertes en la aclamada película. Más aún, con la excelente banda sonora de John Williams, se fabrica el ambiente perfecto para aterrorizar al espectador.

Las cosas se complican cuando, luego de que un niño es asesinado por el depredador, su madre ofrece una recompensa a quien logre cazarlo. Pronto el pueblo se llena de aficionados y pescadores interesados en reclamar el dinero. Un tiburón blanco, de más de tres toneladas, es el responsable y no será sencillo acabar con él. Quint, un pescador local con mucha experiencia en la caza de tiburones, el sheriff Brody y Matt Hooper del Instituto Oceanográfico, buscan terminar con el gran tiburón banco, pero no será tarea fácil. Tiburón está disponible por Netflix y Amazon Prime Video.

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