Violenta, sangrienta y repleta de imágenes sumamente gráficas, esta película de Netflix podrá ser vista solamente para los que tienen estómago duro.
De vez en cuando, una película llega para sorprender a todos con lo que ocurre en la trama central, haciendo sentir incómodo a la audiencia. Desde El exorcista, La masacre de Texas y Holocausto canibal, estos y otros títulos son recordados por haber causado conmoción entre el público al exponerlos a temas tabúes, imágenes impactantes y aterradoras, o situaciones nunca antes vistas en el séptimo arte.
Recientemente, una de las películas más vistas de Netflix ha llamado la atención y no precisamente por las mejores razones. Aunque esta cinta lleva poco tiempo en el catálogo del gigante del streaming, su perturbadora historia ha hecho que ya se encuentre en el Top 10 de la plataforma, desplazando a otras como Rápidos y Furiosos: Hobbs y Shaw, La cabaña y Bajo el mismo cielo.
Cualquiera que se considere sensible y no quiera quedar marcado por una historia inquietante, debe abstenerse de entrar a Netflix y ver Camino hacia el terror. Estrenada en 2003, esta cinta de horror pasó desapercibida, sin embargo, ha tenido un renacimiento con todos los suscriptores de Netflix que se han atrevido a mirarla. Violenta, sangrienta y repleta de imágenes sumamente gráficas, Camino hacia el terror es una película para los que tienen estómago duro.
La historia sigue al estudiante universitario Chris Flynn que termina varado en la zona rural de Virginia Occidental después de tomar un desvío imprudente de un mapa de una gasolinera. Ahí, se encuentra con un grupo de jóvenes en un viaje de campamento en el camino. Al poco tiempo, el grupo se entera de que no están varados por accidente, ya que individuos desconocidos han estado colocando trampas en el área montañosa circundante. Para su horror, los cazadores resultan ser un colectivo de caníbales endogámicos que buscan comida.
El rodaje de la película fue supuestamente difícil, con lesiones y accidentes, como los presuntos brotes de erupciones que tuvo el elenco ocasionados por una hiedra venenosa. A pesar de los percances, hubieron algunas ventajas en la producción como que la aterradora apariencia de los caníbales fue diseñada por el maestro de maquillaje y efectos, Stan Winston, quien trabajó en Terminator 2: El día del juicio final y Aliens. En general, a pesar de la falta de publicidad, la película obtuvo una recaudación de taquilla de 28 millones de dólares.
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