Te decimos si vale la pena esperar una sorpresa más del fantasma más embustero de todos, o si puedes irte en cuanto termine la función.
La espera terminó y después de más de tres décadas, Tim Burton trajo para nosotros al mejor de sus fantasmas para darle continuidad a la historia de Beetlejuice, y traernos una secuela sencillamente llamada Beetlejuice, Beetlejuice en la que Lydia Deetz, ahora adulta y madre de una joven muy parecida a ella, vuelve a encontrarse con Beetlejuice (Michael Keaton) para una nueva serie catastróficas aventuras en contra de este embaucador.
Con un diseño de producción sumamente detallado y una continuación perfecta a este clásico de finales de la década de 1980, los efectos prácticos que tenemos en la cinta y que evocan la atmósfera nostálgica de la primera película del 88 resultan magistrales, convirtiendo la película en una producción imperdible y fresca para los nuevos fans de este mundo.
Sin embargo, para aquellos que se pregunten si deben quedarse hasta el final de los créditos para esperar un guiño más en esta historia, la respuesta clara y breve es que no; Beetlejuice, Beetlejuice no tiene escena post créditos ni tendrás que esperar ninguna sorpresa más allá de este estreno en la gran pantalla.
Pese a que estamos en un mundo donde las escenas post créditos son casi un requisito en los estrenos actuales, Beetlejuice, Beetlejuice se mantiene firme y cierra con un punto final la tan ansiada secuela de esta historia... Ni modo ):