Netflix estrenó una película de terror que fue recibida de manera positiva por las audiencias y se volvió una de las favoritas de la semana, pero producirla fue un gran desafío para la plataforma por esta razón.
Entre el género de terror y las producciones que se enfocan en las posesiones demoníacas, definitivamente no hay debate en que la mejor película es El exorcista, pero también sobresalen otras producciones como El rito y, una de las más recientes, De noche con el diablo. Si tienes ganas de ver algo similar y tu plataforma favorita es Netflix, probablemente ya te hayas cruzado con La liberación dentro de su catálogo.
Junto a otras cintas como El sindicato e Inexpertos, La liberación se unió a ellas en el top de películas más vistas en Netflix y los espectadores han quedado obsesionados con esta historia de horror y posesión demoníaca que, sorprendentemente, se basa en una historia real que es relativamente reciente.
Dirigida por Lee Daniels, esta producción relata la historia de una familia que tras mudarse a su nueva casa en Indiana descubre que hay situaciones inusuales que comienzan a atacarlos, hasta escalar a sucesos paranormales. Luego de la visita de una clarividente, ellos son informados que en su hogar hay una cantidad desbordada de demonios.
Llevar este suceso real a la pantalla grande no fue sencillo para Netflix, pues la plataforma de streaming tuvo que pelear los derechos de filmación con otras casas productoras que estaban dispuestas a apostar todo por adaptar la historia en una película. Después de una intensa batalla de ofertas, el servicio de streaming que es hogar de títulos como Stranger Things y Merlina pagó una cifra millonaria que supera el presupuesto de muchos largometrajes.
De acuerdo con algunos portales como Bloody Disgusting, Netflix pagó alrededor de 65 millones de dólares por los derechos de La liberación, ganándole a productoras como Metro-Goldwyn-Mayer y Miramax. A pesar de los grandes costes de la producción, la cinta no fue un éxito frente a la crítica, pues únicamente recibió un 30 por ciento de aprobación en Rotten Tomatoes ¿En verdad es tan mala? Descúbrelo en Netflix.