Con esta cinta, James Cameron creó una magnífica epopeya tecnológica bajo el mar mucho antes de 'Titanic' y 'Avatar'. Cada detalle de Cameron hizo que esta película se hiciera una clásico de la ciencia ficción.
En los ochenta, la ciencia ficción tuvo un empuje como nunca antes se había visto. Películas como E.T., el extraterrestre, Terminator, Aliens: El regreso y Star Wars: Episodio V - El Imperio contraataca llegaron a la gran pantalla, mostrando nuevas historias sobre mundos desconocidos y seres provenientes de otros planetas.
Una de las mejores películas dentro del género que salió a finales de la misma década estuvo a cargo de nadie más y nadie menos que James Cameron. Luego de los éxitos cinematográficos de 1984 y 1986, protagonizados por Arnold Schwarzenegger y Sigourney Weaver, respectivamente, con esta película, el aclamado cineasta volvió a demostrar por qué es un genio de la ciencia ficción.
Amante de los fondos marinos, con El abismo, James Cameron creó una magnífica epopeya tecnológica bajo el mar mucho antes de Titanic y Avatar. Poniendo atención a cada detalle, los efectos visuales increíblemente bellos y el ritmo de acción, hicieron que esta película de Cameron se hiciera una obra imprescindible en el género de la ciencia ficción. Para la mala suerte de los espectadores, esta obra maestra de ciencia ficción no se encuentra disponible en ninguna plataforma de streaming.
DE ESTO VA 'EL ABISMO', UNA DE LAS MEJORES CINTAS DE CIENCIA FICCIÓN
Tras chocar con un objeto desconocido, el submarino nuclear estadounidense USS Montana se hunde en el fondo del océano. El ejército está enviando a cuatro miembros del Equipos Tierra, Mar y Aire de la Armada de los Estados Unidos, especialmente entrenados en una misión de rescate. El tiempo es corto: no sólo los submarinos enemigos se dirigen al lugar del accidente, sino que también se acerca un huracán.
Liderados por el teniente Hiram Coffey, el equipo y la ingeniera Lindsey Brigman se encaminan a una plataforma de perforación submarina que servirá como base para la misión. Sin embargo, no sólo surgen conflictos con el marido divorciado de Brigman, que dirige la plataforma, sino que los Navy Seals también tienen dificultades para afrontar la situación de presión. A esto se suma el misterio del objeto desconocido que será una gran amenaza.