Una película animada de DreamWorks Animation tiene una fuerte influencia de Quentin Tarantino. Aunque parezca inusual, esta conexión se manifiesta en la narrativa dinámica y en los personajes que buscan redención.
Quentin Tarantino, el aclamado director de Pulp Fiction, Django sin cadenas y Kill Bill, es conocido por su habilidad para mezclar y reinterpretar diversos géneros cinematográficos, desde el cine negro y el western hasta el kung-fu, creando una amalgama de referencias culturales que dialogan entre sí. Este enfoque se manifiesta en su uso del pastiche, una técnica posmoderna que implica la imitación y combinación de estilos de diferentes épocas y géneros, ofreciendo al espectador una experiencia rica en intertextualidad.
La influencia de Tarantino se extiende a numerosos cineastas que han adoptado y adaptado su enfoque estilístico y narrativo. Guy Ritchie, por ejemplo, en Snatch: cerdos y diamantes, emplea personajes excéntricos, reminiscentes del universo de Tarantino. Tony Scott, en Domino, adopta una estilización visual frenética, mientras que Steven Soderbergh, en Indomable, aunque con un enfoque más sobrio, incorpora elementos de acción estilizados y diálogos incisivos que remiten a Tarantino.
Es sorprendente descubrir que una película animada de DreamWorks Animation dirigida al público infantil tiene una fuerte influencia de Tarantino. Los tipos malos ha ascendido rápidamente a los primeros lugares de lo más visto en Netflix, cautivando a audiencias de todas las edades. La historia sigue a Mr. Wolf y su pandilla en su intento de convertirse en ciudadanos respetables, enfrentándose a divertidas y emocionantes aventuras en el proceso.
‘Los tipos malos’: Un éxito en Netflix con influencia de Tarantino
Basada en la serie de libros ilustrados de Aaron Blabey, esta adaptación cinematográfica presenta a un grupo de criaturas consideradas despreciables que buscan redimirse. El elenco de voces cuenta con talentosos actores como Sam Rockwell, Marc Maron, Craig Robinson, Anthony Ramos y Awkwafina.
El director Pierre Perifel, en entrevista con The Magazine of the Visual Effects Society, reveló que se inspiró en grandes del cine como Tarantino y Soderbergh para dar vida a esta animada y vibrante historia. La influencia de Tarantino es palpable en el ritmo dinámico y los diálogos afilados, mientras que la animación combina estilos de Hayao Miyazaki y Ernest & Celestine, creando una estética única y cautivadora.
La influencia del director de Perros de reserva y Bastardos sin gloria se refleja, especialmente en el enfoque de la narrativa y el desarrollo de personajes. “Tarantino es conocido por sus historias de redención y personajes moralmente ambiguos, un tema central en Los tipos malos”, señaló Perifel. Al igual que en las películas de Tarantino, los protagonistas del filme animado son antihéroes carismáticos que buscan redimirse, enfrentando situaciones complejas y peligrosas.
Desde su estreno en Netflix, Los tipos malos ha capturado la atención del público, destacándose por su humor, acción y un mensaje positivo sobre la posibilidad de cambio y redención. La película no solo es un éxito entre los más jóvenes, sino que también ha resonado con adultos que aprecian las referencias cinematográficas y la sofisticación en la animación.