A ocho años de su aclamado estreno en Cannes, el debut directorial de esta cineasta francesa sigue impactando a los espectadores con su retrato violento sobre la adolescencia a través de una película body horror.
Los fanáticos del cine de horror fueron consentidos en 2016 con estrenos como Cuando las luces se apagan, No respires y El conjuro 2, pero en realidad hubieron decenas de estrenos dentro del género para todos los gustos. Hubo algunas que impactaron más que otras, pero quizás ninguna desató la discusión sobre lo grotesca que puede ser una producción tanto como este filme que provocó vómitos, desmayos y gente abandonando la sala.
No hablamos de Terrifier, cinta de Damien Leone que también provocó las mismas reacciones entre las audiencias, sino de una de las producciones que fueron seleccionadas para estrenarse en el Festival de Cannes y que brillaron por las excelentes críticas recibidas. En tan sólo 99 minutos, esta cineasta francesa fascinó y horrorizó a los espectadores del famoso festival con escenas gráficas y una historia coming of age.
Este proyecto fue el debut directorial de Julia Ducournau, realizadora que en 2021 fue galardonada con la Palma de oro por su película Titane. Si bien en dicha cinta exploró nuevamente el body horror y temas de identidad, la primera vez que lo hizo fue en Raw, traducida en Latinoamérica como Voraz. Este largometraje protagonizado por Garance Marillier sobre una estudiante vegetariana cuya vida cambia por completo cuando prueba la carne por primera vez y no puede saciar su hambre por carne humana.
Tras su estreno en Cannes, Raw también llegó al Festival Internacional de Cine de Toronto y las reacciones fueron aún peores. De acuerdo con información de Vulture, algunos espectadores comenzaron a desmayarse ante la violencia gráfica, por lo que tuvieron que llamar a los servicios de emergencia para darle atención a los afectados.
Incluso durante su proyección en el festival francés, las salas estuvieron llenas de personas mayores que se levantaron de su asiento y se salieron a la mitad de la película. ¿En realidad es para tanto? Ducournau reveló en un Q&A tras el incidente en Toronto que estaba impresionada de las reacciones que tuvieron el público al ver su película.