Más allá de la pantalla, la convivencia entre estos actores en realidad no fue del todo buena.
La química entre Johnny Galecki y Kaley Cuoco en La Teoría del Big Bang fue tan palpable en la pantalla como en la vida real. Sin embargo, conquistar el corazón de Galecki no fue tarea fácil, a pesar de que ambos comenzaron a salir y tener citas. Aunque su relación romántica no duró, la manera en que comenzó fue casi tan notable como la de sus personajes, Leonard y Penny.
Según el libro The Big Bang Theory: The Definitive, Inside Story of the Epic Hit Series, Cuoco se dio cuenta de que estaba enamorada de Galecki a mediados de 2007, poco después de ser elegida para el programa. Sin embargo, ambos estaban en relaciones en ese momento.
Un día, cuando la primera temporada estaba llegando a su fin, Galecki invitó a Cuoco a un bar donde estaba con otros chicos del elenco y dado que casualmente ella había terminado su relación ese mismo día, aceptó la invitación. A partir de ahí y ya estando soltera, Cuoco ideó un plan para atraer a Galecki a su habitación usando una excusa ingeniosa: "Hay un insecto en mi habitación. Tienes que venir y matarlo". Pero para su sorpresa Galecki respondió: "No voy a hacer eso", rechazando cualquier intención que tuviera Cuoco.
En el libro, Cuoco explicó: “¡Definitivamente había un insecto en mi habitación y estaba coqueteando con él, así que ambas cosas eran ciertas!". En su defensa, Galecki mencionó que el objetivo era que todos se conocieran mejor y que no quería precipitarse en una relación justo después de que Cuoco había salido de una. "Bueno, no soy tan fácil, Kaley. No soy sólo un trozo de carne. Hay un corazón aquí. Hay sangre real bombeando por mis venas, lo creas o no. Tengo sentimientos. ¡Al menos llévame a cenar y a ver un espectáculo primero!".
A pesar de que su relación romántica no prosperó, ambos actores mantienen una fuerte amistad hasta el día de hoy. La honestidad y el respeto mutuo que compartieron durante su tiempo juntos han permitido que su vínculo perdure más allá de los altibajos románticos, demostrando que su conexión fuera de la pantalla era tan significativa como la de sus personajes en La Teoría del Big Bang.