Fracasó hace 30 años y después se convirtió en una de las películas más vistas
Obsesionado con los conceptos de "ficción", "metaficción" e "intertextualidad", disfruto ver cómo los espectadores recurren a la inteligencia artificial para ofrecer cruces y fusiones entre los universos y las franquicias más famosas del cine y la televisión.

Un título, inicialmente criticado y con poco éxito hace tres décadas, logró resurgir y capturar la atención del público, convirtiéndose eventualmente en un fenómeno cinematográfico.

Desde Aladdin hasta Armageddon, pasando por Titanic (disponibles en Disney+), el cine de los años noventa fue testigo de un éxito rotundo en taquilla, abarcando diversos géneros como la animación, la acción y el drama romántico. Sin embargo, las adaptaciones de videojuegos fueron una excepción notable en este panorama cinematográfico y una película de 1993 ejemplifica muy bien este fracaso.

Lanzada el 28 de mayo de 1993, Super Mario Bros., dirigida por Annabel Jankel y Rocky Morton, fue un ambicioso intento de llevar a la pantalla grande el popular videojuego de Nintendo. La película sigue las aventuras de los fontaneros Mario (Bob Hoskins) y Luigi (John Leguizamo) mientras se aventuran en un mundo paralelo dominado por King Koopa (Dennis Hopper), quien busca dominar el mundo utilizando la evolución y la tecnología.

A pesar de las expectativas generadas por la popularidad del juego, la película fue recibida con críticas abrumadoramente negativas. La trama compleja y oscura, alejada del tono ligero y colorido del videojuego, desconcertó a los críticos y frustró a los fanáticos. La falta de fidelidad al material de origen y las decisiones creativas arriesgadas, como transformar el Reino Champiñón en una versión distópica y surrealista, no resonaron con la audiencia.

Los aficionados esperaban una adaptación fiel y emocionante de su querido videojuego, pero se encontraron con una historia que divergía enormemente de la narrativa sencilla y divertida que conocían. La recepción crítica negativa y el fracaso en la taquilla, donde apenas recuperó una fracción de su presupuesto, consolidaron a Super Mario Bros. como uno de los grandes fracasos en la historia de las adaptaciones cinematográficas de videojuegos.

Super Mario Bros: Del desastre cinematográfico al fenómeno global

Sin embargo, 30 años después, Mario Bros triunfó en el cine con la llegada de Super Mario Bros: La película, una animación a cargo de Illumination Entertainment y Universal Pictures. La adaptación no solo capturó la esencia del juego original, sino que también atrajo a una impresionante lista de talentosos actores para prestar sus voces a los icónicos personajes. Chris Pratt se destacó como la voz de Mario, acompañado por Anya Taylor-Joy como la princesa Peach, Charlie Day como Luigi, Seth Rogen como Donkey Kong, y Jack Black como Bowser.

En la trama, Mario y Luigi se embarcan en una misión épica para rescatar a la princesa Peach de las garras de Bowser, quien planea conquistar el Reino Champiñón. Con una combinación de humor, acción y nostalgia, la película capturó el corazón de los fanáticos y atrajo a una nueva generación de espectadores.

El éxito de Super Mario Bros: La película fue notable en la taquilla, donde acumuló un total de 1,361 millones de dólares a nivel mundial, convirtiéndose en la segunda película más exitosa de 2023, sólo detrás de Barbie de Greta Gerwig. La animación logró no solo recuperar la magia del juego, sino también expandir el universo de Mario de una manera que resonó profundamente con el público, estableciendo nuevas expectativas para futuras adaptaciones de videojuegos en el cine.

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