Con joyería, peinados y escenarios que nos remontan a la época del antiguo Egipto, así es como las princesas clásicas y más recientes de Disney lucirían como deidades de esta cultura.
Desde la llegada de Blancanieves y los siete enanos en 1937 Disney supo que presentar a un grupo de princesas en la pantalla sería algo ideal para hacernos soñar con grandiosos cuentos de hadas e historias en reinos lejanos. El día de hoy la trama de las princesas clásicas como Cenicienta, La Bella y la Bestia como otras tantas ha evolucionado con películas de acción real, algunas más aceptadas que otras, permitiendo versiones modernas de aquellos personajes.
Es natural que los fans busquen constantemente a personajes tan emblemáticos como ellas y las nuevas mujeres con corona que ha presentado la empresa del ratón, adaptadas a la contemporaneidad con elementos que apelan más a la fuerza y valentía que hay en ellas que la fragilidad antes vendida. En ese sentido nos preguntamos cómo serían Moana, Elsa y todas las princesas si además fuesen deidades egipcias veneradas por controlar el clima, la vida y la muerte, el amor y tantos elementos más que se atribuían en el antiguo Egipto a diosas como Isis, Anat, Tefnut, entre otras y este fue el resultado.