Las biopics suelen no tener buena reputación entre los cinéfilos, pero a nivel musical podemos decir que Elvis puede ser parte, fácilmente, de la selecta lista junto a Bohemian Rhapsody, Control, Get on Up, Chadwick Boseman como James Brown; por mencionar algunas. Hoy ya puedes ser testigo del auge y caída del rey del rocanrol interpretado por Austin Butler, el gran descubrimiento del director Baz Luhrmann para este trabajo.
Si no esperas nada, mejor, saldrás de la sala deseando que Elvis Presley siga vivo despues de ver todo lo que involucró la realización de esta película a través de cinco datos básicos que encontrarás en esta producción multimillonaria. Acá puedes consultar las funciones programadas por Cinépolis y Cinemex para todo el fin de semana.
Tardó más de ocho años en llegar al cine
Baz Luhrmann, director del filme y mejor conocido por rifarse la siempre querida Moulin Rouge, que por cierto puedes ver en Star Plus, anunció en el 2014 que iba a dirigir una biopic de Elvis Presley. Sin embargo, el guion se estancó en el infierno del desarrollo durante muchos años. ¿Por qué? Como muchas biopics, el problema está en el enfoque. ¿Nos vamos por algo más personal, algo más clavado, musical, chismoso, etc? Este dilema, más el obvio reto de encontrar al actor perfecto para interpretarlo, retrasaron su estreno hasta hoy.
Harry Styles iba a ser Elvis Presley
Antes de que Austin Butler fuera el elegido para interpretar al rey del rocanrol, otros actores de bastante calibre y reputación estuvieron considerados para el mismo papel. Entre ellos Miles Teller, lo reconocerán por películas como Top Gun: Maverick y Whiplash; Ansel Elgort, del musical Amor Sin Barreras, y el mismísimo Harry Styles. El ex One Direction hubiera sido la elección natural, pero el director pensó que era “demasiado icónico” para representar a otro de su talla. Después escuchó la audición de Butler, lo vio en pruebas de cámaras y voilá: ¡Larga vida al rey del rocanrol!
Odiarás a Tom Hanks
A pesar de que la película trata exclusivamente de Elvis Presley, Luhrmann decidió contar la historia desde el punto de vista de la relación que tuvo con su mánager el coronel Tom Parker, interpretado por Tom Hanks. Ellos tuvieron una relación complicada, por no decir tóxica. Por primera vez desearás lo peor hacia un personaje de Hanks. Neta, amigos, es despreciable. El actor entra a un terreno antagónico donde nunca antes lo habíamos visto y genera tanta repulsión que querrás darle el Oscar pero ya!
Casi tres horas de rock y drama
Baz Luhrmann ha dicho que hay un corte de aproximadamente 4 horas, pero que la versión comercial, la que estás a nada de ver, es la mejor. No te desesperes. Sabemos que has tenido malas experiencias con ese tipo de pelis kilométricas, pero el trabajo de Luhrmann aquí es muy entretenido, y si eres fan del rey, créenos, te la vas a pasar muy bien, cantando, moviendo tus piecitos en la butaca al ritmo del rock de la cárcel. Pa’ pronto, no compres el refresco Jumbo si crees que las ganas de ir al baño te traicionarán. No puedes perderte ni un segundo.
¡La música!
Ya sabemos que viste un disco con el soundtrack de la película. Tiene artistas como Doja Cat (quien por cierto no es tan querido por el fandom de Stranger Things por pedir el contacto de Joseph Quinn), Tame Impala, Eminem, pero es la inspirada en la película y no es el tipo de tracks que encontrarás en esta trama. A lo largo de la historia escucharás a verdaderos cantantes de gospel, clásicos de Elvis en voz de Austin Butler fusionada con grabaciones originales del mismo rey del rocanrol, al actor que hace de Little Richard reventar Beale Street cantando “Tutti Frutti”. Es justicia pura para los orígenes del rock y, por consiguiente, para el melómano de cualquier edad. Esta cinta justifica la famosa aseveración de John Lennon, quien se atrevió a decir que antes de Elvis no había nada. Cuánta razón.