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    'Milagros inesperados': La anécdota de un gato y 10 curiosidades más sobre la película

    La película está disponible en Netflix y nos sigue conmoviendo hasta las lágrimas.

    Ya han pasado 21 años desde el estreno de Milagros inesperados (también conocida como La milla verde o The Green Mile), película que funge como una de las adaptaciones más recordadas de un libro escrito por Stephen King. Pareciera que fue ayer cuando Tom HanksMichael Clarke Duncan protagonizaron este filme nominado a cuatro Oscar y que en muchas listas de las mejores películas de la historia tiene un lugar prominente.

    La historia sigue a un recluso llamado John Coffey (Clarke Duncan) acusado de asesinato y violación infantil, sin embargo, tiene un peculiar don que impacta directamente la percepción de quienes lo rodean, entre ellos el guardia de seguridad: Paul Edgecomb (Hanks). Una película conmovedora, cruda hasta cierto punto y hasta el reflejo de una sociedad que aún en nuestros días todavía tiene un camino amplio para madurar.

    Milagros inesperados está disponible en Netflix y aprovechando esto te presentamos 10 curiosidades que seguramente no sabías sobre el filme.

     

    El duelo real

    Mientras adaptaba el libro a guion cinematográfico, Frank Darabont se enteró de que su gato tenía un tumor y estaba muriendo. El realizador describe la experiencia como el camino de la Milla verde para su mascota, a quien también llama su coguionista ya que lo acompañó en el proceso. El felino falleció casi a la par de que su dueño terminara el libreto.

    Pet Friendly

    Para tranquilidad de muchos, ningún ratón fue herido durante el rodaje y en la escena del pisoteo utilizaron una marioneta.

    La tristeza de Michael

    Para mentalizarse y obtener los sentimientos deseados en escenas tristes, Michael Clarke Duncan recordaba cuando su padre lo dejó mientras él era un pequeño.

    La aprobación de Stephen

    Stephen King considera a Milagros inesperados como una de las adaptaciones más fieles que se han hecho sobre su trabajo literario. Incluso junto a IT, es de las pocas adaptaciones de sus libros que superan la marca de los US$100 millones en taquilla.

    Muchos ratones

    Fueron necesarios 15 ratones durante el rodaje, ya que cada uno de ellos fue entrenado para hacer un truco diferente y así darle vida al peculiar Sr. Jingles.

    La recomendación

    Michael Clarke Duncan no llegó de la nada al papel de John Coffey, sino que Bruce Willis les recomendó a los productores contratarlo para el papel después de su experiencia como compañeros de rodaje en Armageddon.

    La cama de John

    De hecho, para que Michael Clarke Duncan pareciera más grande que el promedio le hicieron una cama pequeña para que su tamaño diera la impresión de ser aún mayor.

    ¿Qué miraban?

    Cuando los protagonistas debían mirar al ratón en realidad estaban viendo un láser que apuntaba hacia al suelo y posteriormente insertaban al roedor, así era más fácil seguir su camino.

    Un favor personal

    Tom Hanks aceptó el papel de Paul Edgecomb como un favor al director Frank Darabont.

    Salto en el tiempo

    Con tal de poder proyectar Top Hat para John Coffey, el año de ambientación de la trama se cambió de 1932 a 1935.

    También lloraron

    Cuenta la anécdota que el último día de rodaje el ambiente era tan emocional que tanto Michael Clarke Duncan como Tom Hanks no resistieron las ganas de llorar.

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