Pocos proyectos cinematográficos han dejado una huella tan profunda en la cultura popular como la trilogía de El Señor de los Anillos dirigida por Peter Jackson. A lo largo de los años, los personajes de la saga se han vuelto inseparables de los actores que los interpretaron, desde Ian McKellen como el sabio Gandalf hasta Viggo Mortensen como el valeroso Aragorn. Sin embargo, el elenco que conocemos hoy pudo haber sido completamente distinto, ya que varios actores reconocidos rechazaron participar en esta ambiciosa adaptación de la obra de J.R.R. Tolkien.
Antes de reunir al reparto definitivo, Jackson consideró a numerosas estrellas para dar vida a los icónicos personajes de la Tierra Media. Desde actores consagrados en el cine de acción hasta intérpretes de prestigio en Hollywood, varios nombres importantes declinaron la oportunidad de formar parte de la épica trilogía. A continuación, exploramos cinco casos de actores que pudieron haber cambiado la historia de El Señor de los Anillos, pero que, por diversas razones, optaron por decir no.
Sean Connery
Constantin Film
El legendario Sean Connery tuvo en sus manos la oportunidad de interpretar a Gandalf, pero decidió rechazarla. Peter Jackson estaba tan interesado en él que logró que New Line le ofreciera un pago de 30 millones de dólares más un 15 por ciento de la taquilla. A la postre, la trilogía recaudó casi 3 mil millones de dólares, convirtiendo la negativa de Connery en una de las decisiones más costosas de su carrera. En lugar de embarcarse en la Tierra Media, optó por protagonizar La liga de los hombres extraordinarios, un fracaso de taquilla que resultó ser su última película.
Años después, Connery explicó que su rechazo se debió a que no entendía la historia. “Leí el libro, leí el guión, vi la película. Aún no lo entiendo”, admitió. Ian McKellen terminó convirtiéndose en el Gandalf definitivo, un papel que le otorgó reconocimiento mundial. Incluso bromeó sobre cómo habría sido la interpretación de Connery: “Gandalf habría sido escocés… ¡You shall not pash!”. La anécdota refuerza la idea de que, por más icónico que Connery fuera, algunas actuaciones parecen destinadas a otras manos.
Christopher Plummer
Olympus Pictures
Christopher Plummer, conocido por su papel en La novicia rebelde, también rechazó interpretar a Gandalf, a pesar de ser un fan de Tolkien. Su decisión no se basó en la historia, sino en la duración del rodaje. Pasar tres años en Nueva Zelanda no le resultaba atractivo, ya que, como él mismo dijo, había otros lugares que quería visitar antes de morir. Con su negativa, dejó el camino libre para Ian McKellen, a quien más tarde elogió por dar calidez al personaje.
A pesar de rechazar este papel icónico, Plummer siguió acumulando grandes logros en su carrera. En 2012 ganó su primer Oscar con Beginners, convirtiéndose en el actor más longevo en recibir la estatuilla. Además, en 2018 fue nominado por Todo el dinero del mundo, un papel que asumió en el último momento tras la salida de Kevin Spacey. Aunque no haya vestido los ropajes de Gandalf, su legado en el cine quedó más que asegurado.
Daniel Day-Lewis
Focus Features
El meticuloso Daniel Day-Lewis, ganador del Oscar por Petróleo sangriento, fue una de las opciones principales para dar vida a Aragorn. Peter Jackson insistió en varias ocasiones para convencerlo, pero el actor rechazó la oferta repetidamente. Day-Lewis rara vez participa en franquicias de gran presupuesto, pues prefiere proyectos más íntimos y exigentes. En una entrevista de 2009, explicó que la posibilidad de aburrirse en un set tan grande le resultaba desmotivadora.
Finalmente, el papel recayó en Viggo Mortensen, quien logró una interpretación inolvidable. Por su parte, Day-Lewis continuó con su selecta carrera y en 2017 se retiró de la actuación tras su trabajo en El hilo fantasma. Su rechazo a la saga de Tolkien es solo un ejemplo más de su perfeccionismo y de su tendencia a elegir papeles que lo desafíen a nivel personal y artístico.
Nicolas Cage
Touchstone Pictures
Si hay un nombre que sorprende en esta lista, es el de Nicolas Cage. El actor, conocido por su participación en Contracara y 60 segundos, estuvo cerca de interpretar a Aragorn. Sin embargo, tuvo que rechazar el papel debido a compromisos familiares. No fue la única gran oportunidad que dejó pasar, ya que también rechazó un papel en Matrix por la misma razón.
Cage nunca se arrepintió de su decisión, pues aseguró que disfruta más las películas cuando no ha trabajado en ellas. Su carrera tomó un rumbo muy diferente, protagonizando desde éxitos de acción hasta producciones más extravagantes. Aunque su versión de Aragorn seguramente habría sido única, la trilogía encontró en Viggo Mortensen al actor perfecto para el papel.
Russell Crowe
Universal Pictures
Russell Crowe, ganador del Oscar por Gladiador, fue otro actor considerado para interpretar a Aragorn. Sin embargo, su decisión de rechazar el papel estuvo ligada a la oferta económica. La producción, con un presupuesto ajustado, le propuso un porcentaje de la taquilla en lugar de un pago fijo, algo que en su momento no le pareció atractivo.
Años después, Crowe admitió que había cometido un error. En una entrevista con Howard Stern, reveló que sintió que Peter Jackson no lo quería realmente para el papel, ya que el director tenía en mente a Viggo Mortensen. Con el tiempo, Mortensen se convirtió en el Aragorn definitivo, mientras que Crowe continuó con su carrera en Hollywood, aunque nunca pudo ser parte de la épica historia de la Tierra Media.