Existe la idea en el fandom de Dragon Ball de que Goku es un mal padre y, sinceramente, esto no podría estar más lejos de la verdad. ¿Un mal padre daría la vida por su hijo? ¿Un mal padre entrenaría con su hijo durante un año seguido en duras condiciones? ¿Un mal padre haría todo lo que estuviera en su poder para asegurarse de que su hijo estuviera bien?
Goku es un gran padre. No es un padre normal, pero claramente ama a sus hijos. Eso es más evidente con Gohan que con Goten, pero sigue siendo cierto para este último. Dicho esto, Goku es un hombre imperfecto con sus propios vicios, y su egocentrismo ocasional puede llevarlo a tomar malas decisiones o simplemente a no comprender lo que sus hijos necesitan de él. Sin embargo, se trata de un hombre que siempre ve por ellos. Debido a esto, a continuación te compartimos cinco momentos en los que Goku demostró ser un asombroso papá.
Las dos veces que murió por Gohan
Los malos padres no mueren por sus hijos, y mucho menos dos veces. Tal vez sea porque Goku sabe que las Esferas del Dragón están ahí como una red de seguridad, pero acepta su destino cuando significa proteger a Gohan. La oportunidad nunca ha surgido, pero es más que probable que Goku también haga lo mismo por Goten.
Curiosamente, esto significa que tanto Goku como Piccolo mueren por Gohan en puntos separados de la historia. Está claro que la relación de Gohan con los dos debe ser paralela, pero Piccolo no es representado como una figura paterna como lo es Goku.
Siempre es un padre activo cuando está vivo
La mayor crítica lanzada a la paternidad de Goku es que no está presente con frecuencia. A los fanáticos les encanta mencionar cómo Piccolo "crió" a Gohan durante un año, pero veamos los hechos reales: Piccolo mató al padre de Gohan, lo secuestró, lo dejó en la naturaleza durante seis meses y luego lo entrenó brutalmente durante aproximadamente seis más. No porque Goku no estuviera presente, sino porque estaba muerto.
Cuando Goku está vivo, es un padre muy presente y activo. Pasa básicamente todo su tiempo libre con Gohan en el arco de Cell, y Dragon Ball Super a menudo ha mostrado a Goku disfrutando del tiempo en familia. Realiza viajes de entrenamiento, pero la implicación es que está en casa con bastante frecuencia entre arcos argumentales.
Todo el tiempo de calidad que pasa con Goten en Super
Debido a que Goten se presenta en un arco argumental en el que Goku está muerto la mayor parte del tiempo, los dos no logran establecer ningún vínculo significativo entre padre e hijo en el transcurso de la serie original. Está claro que tienen una relación definida al final de la serie, pero no hay una profundidad real en su dinámica como la que hay entre Goku y Gohan.
Dragon Ball Super intenta remediar este hecho no dándole a Goten un arco como el de Gohan, sino simplemente mostrando a Goku y Goten actuando como padre e hijo durante los momentos de inactividad. Esto funciona considerando lo plano que puede ser un personaje de Goten. Es agradable ver a Goku actuar nuevamente como un padre más tradicional, algo que como tal no se ve después de que Gohan crece.
Fue al espacio exterior para salvar a su hijo
No cualquier padre iría al espacio exterior para salvar a su hijo. En el momento en que el cuerpo de Goku se cura, marcha al espacio para salvar a su hijo de las fuerzas de Freezer. Y no solo eso, pues Goku viene preparado ya que solicitó al Dr. Brief que le equipara una sala de gravedad para que pueda entrenar de camino a Namek.
Al abusar de la capacidad de un Saiyajin para volverse más fuerte después de casi morir, Goku se vuelve astronómicamente fuerte para la pelea en Namek. Puede salvar a su hijo de morir debido a una fractura de cuello, cortesía de Recoome. A partir de ahí, Goku controla la situación antes de que el Capitán Ginyu le robe el cuerpo.
Engañó a la muerte para salvar a su hijo
El pobre Gohan realmente "deja caer la pelota" cuando se enfrenta a Super Buu. Habría ganado, pero Gohan termina dejando que Gotenks tenga su turno, quedando así absorbido en el proceso. Goku se ve obligado a observar cómo su hijo está esencialmente marcado para morir. Por fortuna para él, Rou Kaioshin está cerca y está más que dispuesto a dar su vida por Goku.
Quizás para Goku engañar a la muerte no sea exactamente obra suya, pero en el momento en que pudo, fue al más allá para encontrar a un hijo que pensó que había muerto. En cambio, se reunió con un hijo ahora vivo y vio a Gohan entrenarse para convertirse en el guerrero definitivo.