Después de mucha anticipación, la sexta temporada de The Crown ya llegó a Netflix. La parte 1 de esta entrega llegó para impresionar a los espectadores fanáticos de los dramas biográficos, aunque no todas las sorpresas fueron para bien. La productora de streaming que nos ha dado series como Dahmer - Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer y la aclamada Narcos parece haber fallado en su nueva tanda de episodios y los fanáticos no están tan seguros de lo que vieron en pantalla.
La muerte de la Princesa Diana (Elizabeth Debicki) era uno de los momentos más esperados por los espectadores, pues fue uno de los eventos trascendentales en la historia y la cultura popular. La línea temporal finalmente llegó a dicho accidente, pero se presentaron algunas cosas que no eran del todo ciertas. Si bien hubo cosas verdaderas como la reconciliación entre Carlos (Dominic West) y su primera esposa o el regalo que recibió Harry (Luther Ford) de parte de su madre después de su muerte, acá te dejamos algunas diferencias entre la realidad y lo que se mostró en Netflix.
Dodi Fayed no le propuso matrimonio a Diana
Los rumores alrededor de si Dodi y Diana estuvieron comprometidos o no han sido objeto de especulación desde hace 25 años, pero The Crown los utiliza para profundizar en la relación que hubo entre los dos. En la serie se muestra cómo ambos escogen el anillo de compromiso y le propone matrimonio la noche en que mueren, tomando como referencia las declaraciones del padre de Fayed, pero de acuerdo con una investigación realizada por Operation Paget Inquiry Report, Dodi sí compró el anillo antes del accidente, pero murió antes de poder realizar la propuesta.
No todos los paparazzi iban en moto
Durante la escena de persecución vemos cómo el Mercedes en el que Diana y Dodi se trasladaban es perseguido por una horda de paparazzi en motocicletas, pero lo cierto es que era una mezcla entre motos y autos, según los datos de Paget Inquiry Report. Los cambios realizados por Netflix viene de la intención de no saturar el cuadro de tantos automóviles y así permitir la visibilidad del carro en el que la protagonista y su pareja se movían por la ciudad.
El estado del chofer de Diana era más grave
Una de las partes más importantes en el accidente fue el conductor que manejaba el Mercedes. Tanto él como la pareja fallecieron en el accidente, pero los guionistas de The Crown no prestaron tanta atención al estado en que se encontraba el chofer. Si bien sí lo muestran brevemente durante una toma al enfocar una bebida a medias, no hacen énfasis en que Henri Paul, el conductor, tenía 1.87 gramos de alcohol por litro de sangre, que en 1997 era tres veces mayor al límite permitido en Francia; en vez, le echan la mayor parte de la culpa a los paparazzi.
Príncipe William no desapareció tras la muerte de Diana
Todo mundo sabe que los Príncipes William y Harry fueron los que más sufrieron la muerte de Diana, su madre. En el episodio 4, titulado “Aftermath”, se plantea que William desaparece por unas cuantas horas tras descubrir el fallecimiento de su mamá. Aunque este retrato de la repercusión de la noticia sobre su hijo es bastante poderosa en temas dramáticos, William reveló en 2021 que cuando recibió la noticia, pasó su duelo en una iglesia llamada Crathie Kirk, además de sobrellevar la pérdida explorando los bosques escoceses.
La Reina Elizabeth no fue insensible ante el accidente
Quizás este sea uno que haga dudar a los espectadores, pero al final de la parte 1 de la temporada 6 de The Crown se muestra cómo la Reina Elizabeth (Imelda Staunton) es completamente insensible ante la pérdida de Diana, recitando un discurso frente a la televisión nacional que se siente cruel. Sin embargo, de acuerdo con información de algunos medios, la Reina prefirió darle prioridad a cuidar de sus nietos durante el fallecimiento de su madre en vez de revelar la noticia al público.
¿Diana y Dodi aparecieron como fantasmas?
Esta temporada de The Crown ha sido una de las más controversiales, pues la historia muestra cómo Diana y Dodi regresan como espíritus para visitar a sus seres queridos. A pesar de que el creador de la serie, Peter Morgan, explicó que la intención era mostrar el impacto que tuvieron sus muertes sobre la vida de los demás, el público lo interpretó como algo literal, haciéndoles creer que en realidad eran sus fantasmas, algo que jamás ha sido declarado por la familia real británica.