La industria cinematográfica tal y como la conocemos el día de hoy no podría ser igual sin grandes mentes como las de Stanley Kubrick y Steven Spielberg, quienes han sorprendido al público llevando a las salas de cine historias increíbles como El resplandor, 2001: Odisea del espacio, E.T., el extraterrestre y Jurassic Park. A pesar del paso de los años, éstos y otros directores han pasado a la historia por presentar cintas provocativas, emocionantes y arriesgadas a los espectadores.
Lograr una escena no es una tarea sencilla y aunque en ocasiones es necesario que los protagonistas se esfuercen un poco más, algunos directores han ido más allá de lo razonable incluso a costa de la seguridad involucrados. Buscar lograr nuevas cosas está bien, siempre y cuando se cuente con el consentimiento explícito de las personas y se asegure el bienestar de todos. Estos son los directores que provocaron lesiones permanentes, angustia mental y otras experiencias traumáticas en los actores, todo por lograr una secuencia.
Roman Polanski
Roman Polanski es uno de los directores más polémicos que desde la década de los setenta ha sido señalado de cometer múltiples abusos sexuales a lo largo de su carrera. En la cinta de El bebé de Rosemary, la actriz Mia Farrow fue obligada por Polanski a comer hígado de pollo crudo de verdad, a pesar de que ella era vegetariana. Además de que comer carne de pollo crudo es sumamente peligroso, la toma se hizo en más de una ocasión.
Alfred Hitchcock
Alfred Hitchcock se ganó la reputación de hacer todo lo necesario para conseguir una escena y era conocido por cruzar los límites, diciendo: "Todos los actores deben ser tratados como ganado". En la producción de Los pájaros, Hitchcock le prometió a Tippi Hedren que solo usaría robots, no pájaros vivos. Hitchcock le mintió y ordenó a la producción que le arrojaran cuervos y palomas vivas a Hedren sin previo aviso.
Stanley Kubrick
A menudo, Kubrick requería que sus actores filmaran la misma escena docenas de veces hasta que estaba satisfecho. Kubrick hizo que la experiencia de Shelley Duvall en El resplandor fuera un verdadero infierno, causándole un daño psicológico permanente. Kubrick obligó a Duvall y a Jack Nicholson a filmar una escena 127 veces, lo que provocó lesiones físicas en las manos de la actriz. En otra de las secuencias, las lágrimas de Duvall fueron reales debido a la deshidratación que sufrió.
James Cameron
Es bien sabido que James Cameron es un perfeccionista, a tal punto que ha desarrollado su propia tecnología para lograr cintas como Avatar y Avatar: El camino del agua. Para una de las escenas donde se hunde el barco de Titanic, Cameron decidió dejar el agua a temperatura ambiente para que la interpretación fuera lo más fiel posible. Cuando Leonardo DiCaprio está esposado a un tubo y Kate Winslet comienza a temblar mientras intenta liberarlo, no fue más que una reacción a la temperatura del agua.
Steven Spielberg
Para Tiburón, Steven Spielberg contrató a la actriz Susan Backlinie para interpretar a la primera víctima del animal marino. Cuando llegó el momento de filmar su escena, un buzo bajo la superficie la arrastró hacia abajo, actuando como si fuera un tiburón agarrándola. Como la escena no quedaba como él quería, Spielberg le pidió al buzo que la jalara a Susan sin avisarle, de modo que terminó jadeando desesperadamente por aire de verdad.