El nombre de Steven Spielberg comienza a sonar cada vez más fuerte en esta temporada de premios debido a su nueva película The Fabelmans, protagonizada por Gabriel LaBelle, Michelle Williams y Paul Dano, que se caracteriza por sus tintes autobiográficos al narrar la vida de un joven aspirante a director que enfrenta el fracaso del matrimonio de sus padres.
Pero en este 2022, el director de Tiburón y Jurassic Park no es el único en ilustrar fragmentos de su vida en la pantalla grande. El mexicano Alejandro González Iñárritu estrena este fin de semana en las salas de nuestro país, su más reciente película, Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades, en la que recurre a un renombrado periodista como su alter ego para reflexionar sobre su identidad y raíces.
'Los 400 golpes'
El debut de François Truffaut no es sólo una de las películas más influyentes en la historia del cine, sino que también introdujo la forma en que un director puede contar su propia historia personal con una intimidad impresionante. Los 400 golpes se centra en Antoine Doinel, un niño que proviene de una familia fracturada y no puede evitar meterse en problemas en las calles de París. Pero encuentra en las salas de cine su única ruta de escape.
'El árbol de la vida'
Uno no puede evitar tener la sensación de que lo que está en cada secuencia de El árbol de la vida es también lo que está en la mente de Terrence Mallick cuando reflexiona sobre su infancia y su lugar en el universo. Esto se debe a que la película se centra en la familia O'Brien, que al igual que la familia de Mallick, vivía en Waco, Texas, y parecía tener un padre ambicioso y dominante muy parecido al que interpreta Brad Pitt.
'Persépolis'
Basada en la novela gráfica autobiográfica de Marjane Satrapi, Persépolis es una película sobre la adolescencia y el crecimiento de la joven Marji. Desde la rebelión juvenil hasta crecer bajo un régimen opresivo, la historia de Marji se cuenta con una voz poderosa, brindando un relato de primera mano de las luchas que surgieron durante la revolución iraní.
'Lady Bird'
Aunque no se trata de una película autobiográfica en el estricto sentido del término, Lady Bird es la estrategia, dentro de la ficción, que utiliza Greta Gerwig para iluminar su propia relación con su ciudad natal, Sacramento, al evocar los sentimientos complicados que todos tienen con sus raíces, y cómo incluso si la maldijiste cuando eras adolescente, es una parte inseparable de quién eres.
'The Souvenir'
Al igual que la protagonista de The Souvenir, Julie (Honor Swinton Byrne), Joanna Hogg era un estudiante de cine a principios de los años 80 que tenía una relación con un hombre mucho mayor que también era adicto a la heroína. Resulta ser una introducción reveladora a la edad adulta para Julie, y Hogg hace un trabajo cautivador al trabajar sobre las sensaciones de descubrimiento que conlleva tener esa edad.
'Fue la mano de Dios'
En Fue la mano de Dios, Paolo Sorrentino describe sus momentos decisivos en Nápoles en 1984, la ciudad que mejor conoce y donde creció. Vuelve a visitar los momentos felices de su juventud, incluyendo comidas alegres, viajes en barco con su familia, el despertar sexual y su temprana afición por el cine y el fútbol. No especifica qué partes de la película son explícitamente autobiográficas, pero, como bien lo señala el propio director "casi toda la película refleja la vida real".
'Belfast'
Belfast es bastante clara sobre la infancia real de Kenneth Branagh. Su padre y el personaje de Jamie Dornan tenían el mismo trabajo. La escuela primaria a la que asiste Buddy (Jude Hill) es el alma mater del propio director. Buddy y su abuela ven una presentación de A Christmas Carol en un teatro local, una experiencia transformadora de la que habló Branagh en una entrevista con el Belfast Telegraph. Incluso hay un momento en que se ve a Buddy leyendo un cómic de Thor, y Branagh dirigió la primera película de Thor para Marvel Studios.
'Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades'
A partir de sus propios recuerdos y sueños, Alejandro González Iñárritu explora innumerables problemas con los que ha estado lidiando en su propia vida, desde la identidad como inmigrante hasta el dolor y la mortalidad. Bardo se centra en un periodista mexicano convertido en documentalista (Daniel Giménez Cacho) quien, luego de cierto éxito, se mudó con su familia a Estados Unidos. Pero está lidiando con su propia identidad cuando descubre que ningún lugar le despierta un sentido de pertenencia.