El director chileno Nicolás Molina, se graduó en Dirección Audiovisual en la Universidad Católica de Chile en 2009. Sus cortos El Jabalí y El Atleta han tenido destacada presencia en festivales. En 2014 estrenó Chile Suena, una serie de micro-documentales para TV que retrata con singularidad las calles de Chile a través de una clasificación poco convencional: sus sonidos. Ese mismo año estrenó su primer largometraje, el documental Los castores (2014) el cual dirigió junto a Antonio Luco. Este documental fue gratamente recibido por la crítica y estuvo nominado al Premio verde de Sheffield en el Festival Internacional de Documentales de Sheffield. Flow (2018) es el primer documental que dirige en solitario, también se presentó en el Festival Internacional de Documentales de Sheffield, así como en Santiago Festival Internacional de Cine y en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara.