Considerada como uno de los 10 talentos emergentes españoles a tener en cuenta, Belén Funes estudió dirección en la Escuela Superior de Cine y Audiovisuales de Cataluña (ESCAC) y más tarde viajó a San Antonio de los Baños para cursar un máster de guion en la prestigiosa escuela cubana EICTV. Cuando acabó sus estudios empezó a desempeñase como asistente de dirección y script participando en proyectos de Isaki Lacuesta, Mar Coll e Isabel Coixet entre otros. En 2015 estrena su primer cortometraje titulado Sara a la fuga, alzándose en el Festival de Málaga con las biznagas de plata al mejor corto y al mejor director. Participó en el talent lab del Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) durante el desarrollo de su primer largometraje La hija de un ladrón (2019), por la que se convirtió en la única mujer nominada a Mejor dirección novel en los Goya 2020.