Graduada de Lillehammer University College en la primavera de 2017, Emilie K. Beck empezó su carrera en la industria del entretenimiento trabajando frente a la cámara como actriz de comerciales. Más tarde, ganó reconocimiento como actriz por su trabajo en la película The Orange Girl (2009) y la serie web de éxito Stuck on Aftenposten (2016-2018). Después de estar frente a la cámara durante muchos años, empezó a dirigir en el año 2011 numerosos cortometrajes. En 2022 presentó su primer largometraje: el documental No Place Like Home, que sigue la historia de una joven adoptada y atrapada entre dos culturas que intenta descubrir los secretos de su pasado. También incursiona en la ficción con la comedia romántica Royalteen para Netflix, el cual codirige junto a Per-Olav Sørensen, y sigue la historia de un príncipe y una joven recién llegada que tienen sentimientos el uno por el otro pero son conscientes de que su relación podría ponerlos en una situación imposible.