Cuando Mara Wilson tenía cinco años cuando quiso seguir los pasos de su hermano en la actuación. Sus padres se negaron al principio, pero después Mara consiguió que aceptaran. Entonces apareció en varios comerciales e tuvo su primera participación en la pantalla grande en Papá por siempre (1993), protagonizada por Robin Williams y Sally Field. Pero su gran oportunidad llegó como la protagonista del remake de Milagro en la calle 34 (1994). A los nueve años, Mara fue elegida para el papel principal en la adaptación cinematográfica del libro de Roald Dahls, Matilda (1996). Lamentablemente, durante la filmación, Mara perdió a su madre por cáncer de seno, pero siguió adelante con la grabación de película, para asombro y admiración de sus coprotagonistas adultos. Mara protagonizó tres películas durante los siguientes tres años, la última de las cuales fue en Thomas and the Magic Railroad (2000). Se retiró de la actuación en el 2000 y desde entonces se ha centrado en la escritura, pero volvió a actuar en 2012, sobre todo prestando su voz en series animadas.