El director de cine ruso Dmitry Kiselev empezó su carrera como asistente de dirección en cintas como Se busca (2008) y La última noche de la humanidad (2011). También se desarrolló como editor antes de hacer su debut como director en 2009 con la película Black Lightning, un thriller de ciencia ficción que codirigió junto a Aleksandr Voytinskiy. En 2018 fue nominado al premio a la Mejor película en los Golden Eagle Awards por su trabajo en Spacewalker (2017), una cinta de drama histórico que sigue a la Unión Soviética que está preparando a dos cosmonautas para el primer paseo espacial en el intento por mantener el liderazgo en la carrera espacial. En 2023 presenta 12 horas para el fin del mundo, que sigue la historia de Valery Arabov, un astronauta que debe ayudar desde la estación espacial a su hija de 15 años a salvar a su familia luego de que cayera una lluvia de meteoros en la Tierra.