En una comunidad pesquera de Nicaragua, los pobladores tienen creencias específicas y un respeto propio por el agua. Los límites que separan el mar con la tierra son mágicos, de forma similar que las sirenas, peces que, según la comunidad, tienen el vientre hacia abajo. A pesar del respeto por las leyendas de dichos seres, considerados como dueños del mar y ofrecer banquetes en el fondo del mar para los hombres que se aventuran, la situación en el mar ha ido empeorando. Para los habitantes de Bilwi, el pueblo pesquero, se ha perdido el favor de las sirenas. Decenas de buzos descienden al fondo del mar y vuelven a tierra con el cuerpo paralizado, inconscientes y sin alimento, rodeados en una violencia constante que se ha mantenido en el país por varios años. El reino de la sirena es un documental mexicano, dirigido por Luis Rincón.