Ben Affleck es ese ex tóxico que no te suelta el bracito aunque ya esté con otra persona. El actor de El último duelo ha vuelto a ser el centro de críticas del internet después de que, en una entrevista, insinuara que debido a Jennifer Garner fue que comenzó a beber.
Recordarán cuando Ben y Jenn estuvieron casados, tuvieron 2 hijos y parecían tener una historia de amor y romance perfecta. Pero no fue así, su romance parece más salido de Mujer casos de la vida real, en especial cuando Affleck comenzó a tener problemas con el alcohol y a estar de mujeriego. Obviamente, esto llevó a su separación en 2015, haciendo oficial su divorcio entre 2017 y 2018.
Biennale 2021: Ben Affleck y Jennifer Lopez juntos por primera vez en una alfombra rojaOk, hasta ahí todo bien y parecía que los dos habían seguido su camino en paz, Affleck con Ana de Armas y luego con su ex, Jennifer Lopez, y todos felices. Hasta que el actor de Batman v Superman: El origen de la justicia alegó en una entrevista que la "infelicidad" de su matrimonio lo llevó a refugiarse en el whiskey, así lo comentó en The Howard Stern Show:
Probablemente todavía estaría bebiendo. Es parte de la razón por la que comencé a beber, porque estaba atrapado. Yo estaba como: 'No puedo irme por mis hijos, pero no estoy feliz. ¿Qué hago?'. Y lo que hice fue beber una botella de whisky y quedarme dormido en el sofá, lo cual resultó que no era la solución.
Obviamente, el internet que nada perdona se le fue encima y comenzaron a criticar su actitud bastante machista de culpar a su exesposa de su enfermedad crónica, una enfermedad en la que la actriz de Día de los enamorados lo apoyó hasta donde pudo.
En algunos tuits se pueden leer: "Ahora que Ben está bien culpa a quien lo apoyó... Asco de tipo". Otros inclusive hacen alusión a Chris Pratt y Anna Faris enfatizando que tanto ella como Jennifer "fueron las verdaderas ganadoras al alejarse de la relación". Y otras publicaciones rematan con un, "malditos hombres".
Así está la cosa con el ex Batman, esperemos que pronto aprenda a hablar sólo de sus proyectos y no de las percepciones que tiene de su vida privada.